Shriekback es una de esas bandas a las que la historia otorga el honor de ser testigos de cualquier cantidad de sucesos y hechos que, luego de casi 4 décadas haciendo lo que les gusta en un proceso constante de renovación y reinvención, no son sino los blasones y credenciales que se traducen en la más completa libertad creativa ejercida musicalmente.
37 es el conteo que, cabalísticamente o no, marca el inicio de una serie de sucesos cuya naturaleza obscura bien puede significar cierto advenimiento, afortunado o no, dependiendo del lugar que ocupes en el desarrollo del evento, ya sea como protagonista de las circunstancias o mero deponente.
Shriekback, 37…