Juan Cirerol es uno de estos artistas que le van a sacar ronchas a los puristas y uno que otro huana, pues la carga emotiva que imprime en sus letras contrasta con la sencillez de su interpretación, dejando de lado esa imágen limpia y socialmente aceptable que viene a la mente cuando alguien menciona la palabra «canta autor», ya no se diga comparar su trabajo con el de esas vacas sagradas del folk que cantan bien gacho, tocan bien gacho pero que feeling se cargan.

Malditas Ranas es el pretexto racional que se necesita para movilizar las ideas cuando estas parecen haberse atascado con las emociones y sentimientos, cuando uno decide aventarse de cabeza en una aventura sentimental que no está contemplada ni empata con nuestro camino y objetivos, siendo unicamente uno de esos amores de ocasión o, como dijera el flaco, una de esas aves de paso que son como pañuelos cura fracasos.

Juan Cirerol, Malditas Ranas…